Ya tiene las burbujas - Olé

Si Boedo festeja, el Pelado tiene con qué brindar: le ganó un champagne a la Gata pateando tiros libres.

Estaba juguetón Ramón. Ya recién iniciada la práctica se puso a hacer puntería a los palos de un arco desde posiciones incómodas con algunos de sus asistentes. Luego, junto con Sebastián Rambert, se prendió al loco, con escasísima presencia en el medio, a veces, con uso exagerado de las jinetas. Y, luego, llegó la hora de los tiros libres. A la fila de ejecución: Acevedo, Adrián González, Ferreyra, la Gata Fernández y el propio Pelado. El que no conseguía marcar, superando la barrera de madera y a la resistencia del arquero Champagne, tenía que abonar, justamente, un champagne. Ponele tiza...

Los shoteadores fueron pasando y convirtiendo hasta que, vírgenes, quedaron el técnico y Fernández. El rubio mojó y celebró estridentemente, pero la conquista fue anulada porque el disparo rozó en la barrera. Y al octavo tiro... la metió Ramón, esquinado, aunque el uno no se estiró. Y, sí, propició el triunfo del jefe. "Metí un tiro libre y gané. La Gata me va a tener que pagar un champagne, así que tengo un champancito para tomarme", tiró luego. Las burbujas, si llega a festejar, ya las tiene...