La Gata prefiere no decir si festejaría o no el domingo contra Racing, por si luego cambia de opinión.
Se viene Racing y para San Lorenzo es un partido clave. Bueno, como todos los que quedan hasta el final del Clausura. Pero para Gastón Fernández es todavía más especial. "Sí, es un equipo en el que pasé lindos momentos y siempre será especial enfrentarlo. Ahí me trataron muy bien. Racing me dio la oportunidad de ser el jugador que soy", confiesa.
En lo que sorprende la Gata es en sacarse el cassette a la hora de responder si le gritaría un gol o no. "No sé si lo grito, siempre que me tocó enfrentar a ex clubes me hicieron esa pregunta y al final las cosas por ahí no se daban como yo decía. Así que mejor no digo nada y después vemos cómo sale".
Como todo Boedo, Gastón sueña a futuro pero sin alardes: "Un campeonato sería ideal, aunque va a ser difícil porque todos los que nos enfrentan quieren ser tapa del diario del día siguiente. La ilusión, igual, es grande. El equipo está con mucha confianza, con ganas de cerrar esta campaña de la mejor manera", dice. ¿Y sería justo? "El mérito de San Lorenzo es haber mostrado una regularidad a lo largo del torneo. Desde la tercera fecha estamos en la punta y eso, en un campeonato tan competitivo como éste, es muy complicado", justifica.
Después fue el turno de aclarar para que oscureciera lo que pasó la semana pasada. La Gata había declarado que "los voy a agarrar cansados en el segundo tiempo", refiriéndose a que iba a ir al banco contra Newell''s. Sin embargo, después, apareció como titular, en lo que pareció una maniobra de Ramón para despistar. "Eso fue un poco confuso. Yo en ningún momento dije que iba a ir al banco, dije que Ramón no había confirmado el equipo pero que si se daba la posibilidad de ir al banco, iba a ir contento, apoyando desde afuera y aprovechar si me tocaba entrar en el segundo tiempo". En todo momento, mientras "aclaraba", a Fernández no se le iba la sonrisa de la cara. A buen entendedor...