Alguna vez se enfrentaron en un Tigres-Rayados y dejaron su sello. Hoy, a la distancia, "La Gata" y "Cuqui" no olvidan lo que es un Clásico Regio
Se entusiasman con la propuesta. Le hacen un amague a la distancia y le ceden espacio a la nostalgia. Gastón Fernández, "La Gata", dejó la huella en apenas dos torneos con la camiseta de Rayados. Andrés Silvera, el "Cuqui", paseó su prestigio en tres años de certezas traducidas en goles con la casaca de Tigres.
Ellos, Fernández y Silvera, son los apellidos del gol de San Lorenzo, el líder del torneo argentino. Ellos, "La Gata" y el "Cuqui", son parte de la historia reciente del Clásico de Monterrey, una fiesta que en pocos días será parte de la Ciudad.
"El Clásico lo viví con mucha expectativa y humildad. Monterrey es una ciudad muy futbolera, culta y apasionante. Y los clásicos paralizan a todos: es increíble", comentó Fernández, figura y goleador de profesión. "Sí, es verdad. Es un Clásico muy lindo de jugar. Y mirá que yo jugué varios clásicos... La gente de Tigres, para mí, es una de las más importantes de México", advirtió Silvera, de profesión goleador de raza exquisita.
"Me acuerdo que el clásico es un verdadero espectáculo. Se vive como una fiesta anticipada, más allá del resultado final. Hay bandas de música ranchera en los entretiempos y mucho, pero mucho color. Se disfruta más que acá", explicó Fernández. "Es una experiencia linda porque se vive como una exhibición", acotó Silvera desde lo alto de su experiencia.
¿Y cuál es la principal diferencia con los clásicos argentinos?
Gastón Fernández: "Para mí en Monterrey no se vive como un drama. El que perdió, perdió y punto. Acá en Argentina, el que pierde provoca violencia, incidentes y caos".
Andrés Silvera: "Puede ser que la pasión sea la misma, pero allá se disfruta como una fiesta, como dije antes. No es un sufrimiento. Una vez, por ejemplo, vi a una pareja de hinchas, en la misma tribuna, con las dos camisetas. La mujer era de Tigres y el varón era de Rayados. Y todo bien".
¿Sienten que los extranjeros le dieron el salto de calidad al torneo?
GF: "Influyen mucho, pero el futbolista mexicano también creció en profesionalismo".
AS: "Es que hay extranjeros en casi todos los equipos, que vienen con otra mentalidad. Y la unión de unos y otros es la clave de la mejoría".
¿Apostaron algo para el Clásico?
GF: "Todavía faltan unos días, pero puede ser un asado. Un asado argentino, con chorizos y mollejas" (sonríe).
AS: "Seguro que perdés. Tigres sabe cómo jugar los clásicos. Ya sabés, el que pierde, paga".
Y la broma se extiende: "Yo le marqué un gol a Tigres en el 2-1 que dimos vuelta. No lo olvido más", dice Fernández.
Ellos, Fernández y Silvera, son los apellidos del gol de San Lorenzo, el líder del torneo argentino. Ellos, "La Gata" y el "Cuqui", son parte de la historia reciente del Clásico de Monterrey, una fiesta que en pocos días será parte de la Ciudad.
"El Clásico lo viví con mucha expectativa y humildad. Monterrey es una ciudad muy futbolera, culta y apasionante. Y los clásicos paralizan a todos: es increíble", comentó Fernández, figura y goleador de profesión. "Sí, es verdad. Es un Clásico muy lindo de jugar. Y mirá que yo jugué varios clásicos... La gente de Tigres, para mí, es una de las más importantes de México", advirtió Silvera, de profesión goleador de raza exquisita.
"Me acuerdo que el clásico es un verdadero espectáculo. Se vive como una fiesta anticipada, más allá del resultado final. Hay bandas de música ranchera en los entretiempos y mucho, pero mucho color. Se disfruta más que acá", explicó Fernández. "Es una experiencia linda porque se vive como una exhibición", acotó Silvera desde lo alto de su experiencia.
¿Y cuál es la principal diferencia con los clásicos argentinos?
Gastón Fernández: "Para mí en Monterrey no se vive como un drama. El que perdió, perdió y punto. Acá en Argentina, el que pierde provoca violencia, incidentes y caos".
Andrés Silvera: "Puede ser que la pasión sea la misma, pero allá se disfruta como una fiesta, como dije antes. No es un sufrimiento. Una vez, por ejemplo, vi a una pareja de hinchas, en la misma tribuna, con las dos camisetas. La mujer era de Tigres y el varón era de Rayados. Y todo bien".
¿Sienten que los extranjeros le dieron el salto de calidad al torneo?
GF: "Influyen mucho, pero el futbolista mexicano también creció en profesionalismo".
AS: "Es que hay extranjeros en casi todos los equipos, que vienen con otra mentalidad. Y la unión de unos y otros es la clave de la mejoría".
¿Apostaron algo para el Clásico?
GF: "Todavía faltan unos días, pero puede ser un asado. Un asado argentino, con chorizos y mollejas" (sonríe).
AS: "Seguro que perdés. Tigres sabe cómo jugar los clásicos. Ya sabés, el que pierde, paga".
Y la broma se extiende: "Yo le marqué un gol a Tigres en el 2-1 que dimos vuelta. No lo olvido más", dice Fernández.